Porque tanto el continente como el contenido son muy importantes, y hablando del vino más aún… Te enseñamos todos los trucos para que el vino te sepa auuuun mejor si cabe…
Dentro del protocolo de los vinos, se reconocen 4 tipos de copas para tomar vino:
- Una copa alta tipo flauta para los espumosos
- Una copa borgoña (alta y de boca ancha) para los tintos
- Una copa borgoña, pero más estrecha, para los blancos, ya que en su mayoría no hace falta que se abran con la misma necesidad que los tintos
- Una copa pequeña y estrecha para los vinos dulces y generosos
Y porque una cosa es la teoría y otra la práctica, y porque nos gustan las cosas fáciles… ahí va nuestro consejo: compra copas tipo borgoña. Estas copas- digan lo que digan- son ideales para el tinto, el blanco y el rosado.
Y ten también de champagne en casa, para los momentos en que os apetezca descorchar un espumoso o bien degustar un vino dulce sureño.
¿Quieres más trucos?
- Un truco -no reconocido y en bajito- pero que nos encanta: mantén algunas copas borgoñesas en el congelador y sácalas cuando vayas a abrir un blanco. Un placer para los sentidos…
- Coge siempre la copa por el tallo y nunca por donde la mano esté en contacto con la base esférica donde está el vino. Sino lo calentaremos y perderá su temperatura de consumo…
- A la hora de servir, no llenes del todo la copa. Ya que el vino necesita espacio para abrirse y liberar sus aromas. En el caso del vino blanco, también esimportante para que el vino no pierda temperatura. Mejor ir sirviendo de poco en poco y mantenerlo frío en la botella… Igualmente sé generoso, a todos nos gusta que dentro de los limites, no nos dejen cortos. 😉