Investigadores de la Universidad de Brandeis realizaron una excavación en 2012 en la actual Israel, específicamente en el Palacio Cananea, que data de la mitad de la edad del Bronce. La excavación reveló 40 grandes jarras de vino en una habitación cerrada situada al oeste del patio central.
Se suponía que la producción y distribución de vino tuvieron un papel clave en la vida de los que residían en el Mediterráneo y Oriente Próximo durante la mitad de la Edad del Bronce (1900-1600 AC). Pero no había mucha evidencia arqueológica sobre el vino en la Edad de Bronce que apoyara la importancia del vino en ese período a pesar de la documentación relativa y el arte encontrado.
Usando la espectrometría de masas, los investigadores llevaron a cabo un análisis de los residuos orgánicos de los 40 grandes tanques de almacenamiento. Ellos encontraron que los contenedores tenían los biomarcadores del vino y de las hierbas que se habían añadido a la bebida. También rastrearon a ligeras diferencias en los ingredientes dentro de los tarros que incluyen miel, menta, canela, enebro, resina, aceite de cedro, encina, resina de estoraque, ciprés y el mirto.
La presencia de estos aditivos indica claramente que los seres humanos, incluso durante la Edad del Bronce, tenían una comprensión sofisticada de las plantas y las habilidades que se necesitan para producir bebidas complejas.
“Sobre la base de la naturaleza de la habitación, se anticipó desde el principio que los residuos de las muestras extraídas y estudiadas tendrían el potencial de revelar nuevos e importantes conocimientos, tanto desde el punto de vista científico como arqueológico. Creemos que este estudio no sólo va a cambiar nuestra comprensión de la antigua viticultura y prácticas sociales palaciegas, sino también la forma en que nos acercamos a análisis de residuos orgánicos (ORA) como un ejercicio integral, cualitativo, e interdisciplinario” añadió, el investigador Andrew Koh.
Los investigadores concluyeron que este último hallazgo se suma al conocimiento de la antigua viticultura y la economía palaciega cananea.
El hallazgo fue documentado en la revista PLOS ONE.
Fuente: www.scienceworldreport.com
www.livescience.com
Traducción libre Club Amantes del Vino